Las petroleras rusas redujeron el año pasado en un 6% las exportaciones a Europa, mientras que sus ventas a los países asiáticos se incrementaron un 15,6%, escribe hoy Vedomosti.
Según datos del sector energético ruso que cita el diario, en cifras absolutas Rusia exportó 206,9 millones de toneladas de crudo, un 2,2% menos que en 2012. De esta cantidad, unos 170 millones de toneladas correspondieron al Viejo Continente y 37,1 millones, a China y otros países asiáticos.
Hoy en día, Extremo Oriente resulta un destino más atractivo para el sector petrolero ruso, ya que supone unos cinco dólares más por cada barril vendido, según estimaciones del analista del grupo Kapital, Vitali Kriúkov.
La mayor petrolera rusa Rosneft es líder en exportaciones de crudo a los países asiáticos. Desde 2011, la compañía despacha 15 millones de toneladas anuales a la china CNPC a través del ramal Skovorodino-Mohe. Para 2030, estas entregas deberán sumar los 300 millones de toneladas.
En marzo pasado, las dos empresas acordaron la venta de otros 365 millones de toneladas durante 25 años. En 2013, Rosneft aumentó un 5%, a 15,8 millones de toneladas, sus exportaciones a China y este año prevé suministrar al país asiático un total de 22,6 millones.
Al mismo tiempo, la petrolera redujo sus ventas a Europa en un 1%, hasta 72 millones de toneladas, calcula el codirector de la agencia de análisis Investcafe, Grigori Birg. “Teniendo en cuenta las crecientes obligaciones de Rosneft respecto a las ventas a China y solo un ligero aumento de producción por debajo de un millón de toneladas, cabe esperar que la compañía seguirá disminuyendo sus exportaciones a Europa”, pronostica el experto.
