La Unión Europea y Estados Unidos están elaborando un plan de ayuda financiera en Ucrania a condición de que Kiev comience reformas económicas y políticas, escribe el periódico Kommersant.
Así lo declaró la Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, que subrayó que se trata de “grandes importes”. Las fuentes diplomáticas europeas y los opositores ucranianos confirman esta información.
Los líderes del Maidán insisten en que las reformas se realicen por un gobierno técnico capaz de tomar medidas duras y poco populares y llaman a reforzar el papel del Gabinete. Los opositores indican además que Occidente está pensando no solo en ayudar a Ucrania sino también en sancionar a sus autoridades.
El oficialista Partido de las Regiones no descarta la posibilidad de privar al presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, de parte de sus poderes pero lo condiciona a la celebración de un referéndum. Sin embargo, la agrupación política gobernante afirma que Ucrania es capaz de superar la crisis sin la ayuda de Occidente.
En cuanto a las posibles sanciones, el Partido de las Regiones está convencido de que son tan solo un método de presión psicológica.
En breve, se esclarecerá qué táctica escogió Occidente. El Parlamento ucraniano debe decidir este martes si el país vuelve a la Constitución de 2004 que restringe la autoridad del presidente.
