Es la variación de un gen particular, MAOA-L de la enzima Monoamino oxidasa, lo que hace a algunas personas más proclives a tomar decisiones arriesgadas y salir victoriosas de apuestas financieras, según se desprende de un estudio descrito en la revista Proceedings of the Royal Society B.
“Los portadores de MAOA-L actúan mejor a la hora de tomar arriesgadas decisiones financieras, pues demuestran mayor capacidad de reaccionar de forma óptima cuando resulta ventajoso”, explicó Cary Frydman, del Instituto de Tecnología de California.
Frydman y sus colegas organizaron un experimento con dos grupos de voluntarios: unos, portadores del MAOA-L, y otros, con la variación MAOA-H del mismo gen. Cada participante recibió 25 dólares y tuvo que escoger entre dos tipos de juegos financieros: el primero no implicaba riesgo alguno para su dinero, mientras que el segundo les dejaba la opción de ganar siete dólares o perder cuatro en cada apuesta.
Los del grupo MAOA-L fueron más propensos a asumir el riesgo, “no porque sean más impulsivos sino porque son capaces de tomar mejores decisiones financieras bajo riesgo, según los investigadores. Esta característica ya le valió al MAOA-L el calificativo del “gen de los luchadores”.