El Ministerio de Defensa de Rusia descarta el uso subsiguiente del satélite geodésico militar Geo-IK-2, colocado el pasado martes en una orbita no programada, informó hoy alto cargo del sector espacial castrense.
“Los datos actuales y los anteriores lanzamientos fracasados indican que, con una probabilidad del 99,9%, el Ministerio de Defensa no va a utilizar el satélite Geo-IK-2”, dijo.
La comisión estatal tomará la decisión definitiva sobre el uso subsiguiente del satélite. “Es probable que perderemos el contacto radial con artilugio antes de que la comisión adopte su resolución final”, añadió.
El satélite geodésico de uso militar Geo-IK-2 bajo el número 37363 fue lanzado el pasado martes desde el cosmódromo de Plesetsk, en el norte de Rusia, con ayuda de un cohete de clase ligera Rokot, pero no emitió las señales de radio a la hora prevista y más tarde fue descubierto en una órbita no programada.
La víspera, el Ministerio de Defensa anunció que los militares establecieron contacto con el satélite y que los ingenieros de las tropas espaciales están efectuando pruebas de su equipo. En una reunión que se celebró el miércoles en el Estado Mayor del ejército espacial ruso fue creada una comisión del ministerio de Defensa y la agencia espacial rusa Roskosmos para investigar las causas del accidente.
