A un mes del fin del mundo, según los vaticinios de la civilización Maya, el astrólogo ruso Mijaíl Levin “canceló” el supuesto Apocalipsis.
“El 21 de diciembre no sucederá nada fuera de lo común”, prometió Levin, rector de la Academia de la Astrología de Moscú.
Según dijo a RIA Novosti, las especulaciones en torno al fin del calendario maya y sus consecuencias son alimentadas nada más que por la prensa.
“Es un tema de oro para los periodistas”, explicó.
Al mismo tiempo, Levin señaló que las predicciones sobre el fin del mundo son más un asunto de la astrología, que de la astronomía.
Agregó que el 21 de diciembre no es el último “fin del mundo” de la humanidad. “He sobrevivido al menos tres fines del mundo”, bromeó.
El primer “fin del mundo” en la vida de Levin fue en 1981, pero su aproximación pasó desapercibida porque durante el comunismo esas cuestiones apenas se discutían en la prensa de la URSS. La segunda ocasión se dio en 1999, y la tercera, en 2011.
Será que vivimos en una época en que la gente se aburre con facilidad, aventuró el astrólogo.
Mientras, la fecha del 21 de diciembre de 2012 sigue siendo objeto de polémicas acaloradas.
La semana pasada, las autoridades francesas anunciaron que restringirán temporalmente el acceso al monte de Bugarach que, según algunas profecías, se salvará el próximo 21 de diciembre. Aún así, los lugareños esperan una “invasión” de peregrinos y curiosos, los establecimientos hoteleros ya están desbordados.
En Bolivia, el 21 de diciembre marcará el “fin del egoísmo y la división”. A partir de ese día, Coca Cola y McDonald’s cesarán sus operaciones en el país andino. Según el ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, David Choquehuanca, la salida de estas multinacionales estadounidenses está “en sintonía con el fin del calendario Maya y será parte de los festejos para celebrar el final del capitalismo y el comienzo de la vida”.
